Por: Rodrigo Valdés
Chile hoy se remece debido a la muerte de Marlene Ahrens, la única mujer chilena que se convirtió en medallista olímpica al obtener la presea de plata en los juegos olímpicos de Melbourne en 1956, en la disciplina de jabalina, quien falleció debido a una insuficiencia cardiaca a los 86 años. Además, fue campeona dos veces en los juegos Panamericanos y se coronó cuatro veces en el Sudamericano de Atletismo.
Por otra parte, Marlene es y será un gran ejemplo para las y los deportistas de Olimpiadas Especiales Chile, quienes trabajan de manera primordial con el deporte para superar barreras sociales como la intolerancia, la injusticia, el limitado acceso a la salud y a la educación que se han mantenido por tiempo en nuestra sociedad y deben enfrentar las personas con discapacidad intelectual (DI). Las personas con discapacidad son tres veces más propensas a que se les niegue la atención de salud, según el informe mundial sobre la discapacidad, OMS y Banco Mundial, 2011. No obstante, la activa competencia de las y los jóvenes de Olimpiadas Especiales fue demostrada en los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales Abu Dhabi 2019, donde las y los atletas chilenos se destacaron en diversas disciplinas.
La imagen de Marlene ha sido un ejemplo a seguir y un impulso para el deporte y para muchas mujeres atletas en el mundo. Asimismo nos motiva a fomentar la inclusión de las y los niños, jóvenes y adultos con DI a diversas disciplinas deportivas. También, la inspiración que ha dejado esta destacada medallista ha marcado de diversas formas, especialmente, en la búsqueda por la igualdad de género en nuestra sociedad.
En esta misma línea, en Olimpiadas Especiales creemos que “más allá del campo de juego, el deporte tiene un impacto positivo permanente en atletas, sus familias y sus comunidades”.
Comments